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- Los caminos en la Puna salteña están intransitables y los pasos fronterizos colapsados, lo que perjudica el trabajo de conductores y encarece la logística.
- Para colmo, el Gobierno nacional no cambió la idea de reducir al mínimo la vigencia de Vialidad Nacional.
El presidente de la Cámara de Comercio Exterior de Salta, Javier Cerusico, transmitió la preocupación del sector minero por el estado de la infraestructura vial en la Puna, el cual se agravó con la caída de nieve en los últimos días.
Cerusico dijo en FM Aries que la tarifa de flete normal en el país está entre 2.100 y 2.300 pesos por kilómetro, pero en la cordillera aumenta hasta 3.9000 pesos por kilómetro. Además, el referente del sector exportador salteño criticó el abandono de Vialidad Nacional.
“Esta semana se negoció con organismos internacionales el financiamiento para los tramos cuatro y cinco, que van de Olacapato a Sico. Los otros tres tramos estaban adjudicados a Vialidad Nacional, pero esas adjudicaciones se cayeron”, dijo Cerusico a la emisora citada.
La alusión sobre Vialidad Nacional obedece a una decisión política de la administración Javier Milei, que recientemente anunció la continuidad del plan de ajuste en la obra pública y el desfinanciamiento del organismo que se encarga del mantenimiento de las rutas.
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De acuerdo con versiones periodísticas, el Gobierno de Milei prepara un mega-decreto para disolver, fusionar y transformar organismos públicos que se encargan de velar por la movilidad y el transporte. La redacción está a cargo de Federico Sturzenegger, el ministro de Destrucción del Estado.

Según detalla el diario La Nación, la Casa Rosada prevé la disolución de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) y de la Dirección Nacional de Vialidad. Al parecer, el Ministerio de Economía será el encargado de otorgar concesiones de obras e infraestructuras públicas viales así como servicios públicos de transporte terrestre una vez la entidad sea disuelta.
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Mientras todo esto sucede a nivel país, en las provincias los Gobernadores analizan cómo hacer frente al mantenimiento de las rutas nacionales. Recientemente promovieron un proyecto de ley para coparticipar lo recaudado por el Impuesto a los Combustibles, una medida que choca de frente con la postura de Nación.
Como sea, la nieve y la falta de un Estado presente en el mantenimiento de las rutas perjudica la labor de los choferes de camiones, encarece la logística por el incremento de los costos en los fletes y trastoca las previsiones de las multinacionales que utilizan la materia prima extraída en la Puna salteña. Al mismo tiempo, hay trabajadores que ven esfumarse ante sus ojos los días de descanso por la obligada extensión del roster.
Resulta, cuanto menos, paradójico que un negocio millonario como la minería de litio, plata, oro y cobre (más otras tierras raras presentes en suelo salteño) se vea afectado por decisiones políticas de un Gobierno que con una mano da el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) y con la otra quita mediante el ajuste a los organismos que entienden en la logística. Sin Estado no hay paraíso.
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