Por falta de agua, hay más casos de deshidratación, diarrea y vómitos en el Norte Salteño
Los más afectados son los niños y las niñas de Santa Victoria Este. En los primeros meses de este año se habían registrado al menos 70 fallecimientos en el norte provincial. Al mismo tiempo, Aguas del Norte pidió no consumir agua a quienes vivan en Tartagal, Aguaray y Mosconi.

Nenes del pueblo wichi de Alto La Sierra, Santa Victoria Este, Rivadavia - Foto: Agustín Ochoa / Ilustrativa
El médico encargado del hospital de Santa Victoria Este, José Ordoñez, aseguró que en la zona ha notado “un incremento de enfermedades a causa de la falta de agua” potable y advirtió una gran cantidad de casos de diarreas, deshidratación y vómitos en niños y niñas. Una situación que se extendería a otros parajes y municipios del departamento Rivadavia.
Ordoñez sostuvo que el aumento de casos de gastroenteritis está relacionado con las enfermedades virales respiratorias. Según explico el profesional en declaraciones al diario El Tribuno, la suba se enmarca en un crecimiento general de casos de gripe A y gripe B en toda la provincia.
Por su parte, el médico de Tartagal, Pedro Urueña, precisó que allí se registran entre 70 y 90 casos de diarrea por semana contando a todos los grupos etarios. La cifra no representa un incremento respecto a periodos anteriores: Urueña dijo al matutino citado que es “lo habitual para esta época y este mes del año” en la ciudad cabecera del departamento San Martin.
La situación en el norte salteño es alarmante y podría empeorar a medida que pasen las semanas. Vale recordar que durante los primeros tres meses de este año se reportaron al menos 70 muertes de niños y niñas. Se trató de una cifra superior a la de años anteriores, admitió Silvia Cardozo, subsecretaria del Ministerio de Salud de la Provincia.
SOBRE EL TEMA: Norte Salteño: alarma por la muerte de 70 niños en lo que va del año
Cardozo había señalado que cada una de las causas de muerte se estudia en particular ya que hay distintas causales- como el virus Influenza– que agravan los cuadros de desnutrición y deshidratación. Esto quiere decir que a la pobreza estructural que se vive en el Chaco Salteño, con la falta de agua, hay que sumarle el cambio climático y el Covid.19.

En ese marco, desde Aguas del Norte solicitaron que las personas que vivan en Tartagal, Aguaray y Gral. Mosconi no consuman agua de la red porque la misma no se encuentra en condiciones óptimas debido a la crisis hídrica que atraviesa el norte. Para la prestataria del servicio, los parámetros del agua afectados impactan principalmente “en el aspecto visual”.
“Por tal motivo, hasta tanto las condiciones descriptas mejoren, y previa consulta con el Comité de Emergencia Hídrica, se informa que el agua de red en las zonas especificadas anteriormente no puede ser destinada a consumo poblacional, sino para exclusivo uso sanitario (limpieza, aseo, etc.)”, informaron en un comunicado difundido el martes por la noche.
Asimismo, en plena emergencia hídrica, se han detectado sobreprecios en la oferta de camiones cisterna, venta ilegal de agua potable (200 litros por mil pesos) y maniobras irregulares en la prestación de los servicios contratados.
«En el momento extraordinario, cuando había que contratar camiones, primero no había. La mayoría de ellos se va a la Puna, como así también las empresas perforadoras. El problema es que sí hemos visto una especulación fuerte vinculada con los precios”, afirmó el titular del Ente Regulador de Servicios Públicos, Carlos «Uluncha» Saravia.
El titular del Enresp puso de ejemplo que la contratación de un camión cisterna que costaba $200.000 en apenas días se disparó a $2.000.000, una cifra diez veces superior. A raíz de ello, el Ejército Argentino proveyó tres camiones, el sector privado otros tres y avanzaron en la compra de infraestructura para los municipios.
Durante la crisis hidrica de enero de este año el presidente de Aguas del Norte, Luis Maria Garcia Salado, dijo que habian contratado 67 camiones cisterna, «lo que significa una erogación de 22 millones de pesos mensuales», sostuvo.
Si bien García Salado no aporto detalles del coste de cada uno de esos camiones y de la cantidad que se necesitaron para cubrir la demanda a principios de año, el monto millonario explica el impacto a las arcas públicas de un problema que se repite ahora.
ANTES: Crisis hídrica: se destinan $22 millones al mes para contratar los camiones cisterna
En otras palabras, podemos decir que no sólo no hubo una planificación en torno al problema, sino que para colmo el Estado Provincial no intervino para evitar especulaciones en la contratación del servicio.
En otro tramo Saravia fue consultado por las obras inconclusas del Plan del Bicentenario y del Fondo de Reparación Histórica, dos mecanismos de financiamiento (por al menos 220 millones de dólares) para realizar obras de agua y saneamiento, entre otras, que se tomaron durante el gobierno de Juan Manuel Urtubey.
Saravia desconoció el aval del actual oficialismo al pago de intereses de los créditos mencionados, dijo que cuando se lo pidan publicará el estado de las obras en la provincia porque es «su obligación» y cuestionó: «Yo veo que hay mucha denuncia pública y mediática, pero poca en términos de trabajo efectivo sobre lo que realmente corresponde que se rinda sobre esos fondos«.