Es diputado, fue denunciado por torturador cuando era policía y quiere renovar su banca

Gustavo Orozco es diputado por Rosario de la Frontera. Antes de llegar a la Legislatura fue miembro de las fuerzas de seguridad, función de la cual arrastra graves acusaciones: deberá enfrentar un juicio por vejámenes, torturas, privación ilegítima de la libertad y apremios ilegales.
El diputado provincial Gustavo Orozco considera que Salta «tiene niveles muy altos» de inseguridad porque «se ha dejado de analizarla como se debía». «Hay un sistema que lógicamente no está dando resultados: un sistema judicial donde los delincuentes entran por una puerta y salen por la otra», agrega.
Para el legislador de Rosario de la Frontera, que busca renovar su banca mediante el frente oficialista «Unidos por Salta«, en la seguridad no debe trabajar solamente la Policía sino también «los municipios» que deben «tener una apertura para trabajar con las guardias de seguridad urbanas municipales» y que «los sistemas de vigilancia a través de las cámaras deben mejorar».
Orozco antes de ser diputado fue miembro de la Policía. De allí su emoción al hablar de la temática. «Entre todos tenemos que combatir la inseguridad y delincuencia«, dispara en una entrevista con El Tribuno. No detalla si habla de la conocida «justicia por mano propia», pero lo deja entrever.
Sí cabe mencionar que Orozco está procesado junto a 9 policías por los delitos de “vejaciones agravadas por el uso de la violencia, severidades, torturas, privación ilegítima de la libertad y apremios ilegales (colegiado)”.
Más pronto que tarde, deberá enfrentar un juicio oral y público, el cual se ha retrasado sin razón alguna, a cargo del juez Héctor Sebastián Guzmán. Entretanto, días atrás fue denunciado por un vecino de su localidad por amenazas con armas de fuego. «Te voy a golpear en la calle cuando te agarre, te voy a matar cuando te encuentre«, le habría dicho Orozco al denunciante en las puertas de su hogar.
A mediados del año pasado Orozco había deslizado que pediría licencia para enfrentar el juicio en su contra sin fueros, pero finalmente no lo hizo. Incluso más: ahora quiere que se utilicen las polémicas pistolas Taser.
¿Táser sí o no?
El dipu-policía y sus compinches Omar Exeni e Ignacio Jarsún, también diputados oficialista, presentaron un proyecto para incorporar las Táser. «Las pistolas Taser van a venir a tratar de solucionar situaciones X de inseguridad», sostiene Orozco para luego decir que «los policías no son Rambo» y que si «saca su arma y dispara está expuesto a que vaya preso como ha pasado en muchísimos casos».
En una columna escrita en este medio el colega Carlos Córdoba analizó en profundidad el tema de las Táser. Señaló, por un lado, que los diputados Jarsún, Exeni y Orozco proponen al Ejecutivo que realice un importante gasto en plena crisis económica sin siquiera aportar una idea acerca de la financiación del mismo.
También planteó que habría que analizar cuántos oficiales han sido heridos en los últimos años, en qué condiciones y lugares, entre otras cosas, para poder fundamentar la “eficacia” y “eficiencia” hipotética del uso de las Taser que se propone. O al menos preguntarles a todos funcionarios policiales cuántos de ellos sienten y creen, con la mano en el corazón, que van a sus trabajos con altas posibilidades de ser asesinados día a día. Además, bueno sería entrecruzar la evolución del delito y sus magnitudes para aunque sea imaginar el “peligro inminente” que posibilitaría a las pistolas- si hubiere un policía justo allí- impedir la comisión de un delito.
«En el caso de Salta, no hay estadísticas- o al menos no están disponibles públicamente- actualizadas para tener en cuenta a la hora de debatir si Taser sí o no. Aquí, ahora, no existen más que expresiones de deseo. Los fundamentalistas de la mano dura no exponen un diagnóstico y ya arrojan una solución», suscribió.
Por otro lado, cabe recordar que la Asociaciación de Derechos Humanos Coca Gallardo y la Comisión de Familiares de Detenidos-desaparecidos por Razones Políticas y Gremiales, repudiaron el proyecto de Jarsún y Exeni señalando que el uso de las armas Taser “es un claro retroceso en materia de derechos humanos” ya que “entre 2001 y 2012 Amnistía Internacional denunció al menos 500 muertes en los Estados Unidos a causa de su implementación”. Y agregó, además, que el Comité Contra la Tortura de las Naciones Unidas recomienda “abandonar el uso de armas eléctricas Taser” ya que “causa un severo dolor que constituye una forma de tortura y, en algunos casos, puede incluso causar la muerte”, según el informe del organismo internacional.
Como sea, Orozco insiste en ello en plena campaña, sin aportar más ideas al respecto. Semanas atrás el legislador criticó la visita del vicegobernador Antonio Marocco al intendente de su localidad Gustavo Solís: pidió al mandatario Gustavo Sáenz que intervenga para esclarecer la alianza política.
Incluso más: redobló las apuestas y habló de la baja en la edad de imputabilidad. «Hay que hacerlos responsables de los actos que llevan adelante», apuntó Orozco.